Volvamos a 1870, cuando William abrió su barbería en Jermyn Street y comenzó a peinar a muchos de los jóvenes de Mayfair. Este hábil barbero, que rápidamente estableció conexiones con la élite de Londres, se inspiró en sus viajes a los baños turcos para crear su primer perfume, Hammam Bouquet. No pasó mucho tiempo antes de que llegara la demanda de sus clientes y William respondió con entusiasmo.

William fue nombrado barbero de la corte y perfumista oficial de la reina Victoria, gracias a su capacidad para diseñar fragancias únicas y exquisitas, lo que le valió este prestigioso reconocimiento. Tras su fallecimiento, la reina Alejandra concedió al señor Penhaligon su primera autorización real en 1903.

Durante el reinado de la reina Isabel II, Penhaligon tuvo el honor de recibir dos Órdenes Reales más, una del Duque de Edimburgo en 1956 y la otra de Su Alteza Real el Príncipe de Gales (ahora Su Majestad el Rey) en 1988.