Durante miles de años, la madera sagrada libera una esencia aromática que cobra vida en una mezcla fascinante, impregnada de notas terrosas de madera e incienso. Codiciado por los chamanes durante siglos, se cree que esta madera espiritual tiene el poder de proteger y allanar el camino para la buena fortuna. La calidez del caramelo, la dulzura del haba tonka y la delicadeza del vetiver se combinan en la intensidad del Palo Santo para crear una fragancia que libera a los espíritus.
Procedente de una larga familia de artesanos de cuero españoles, Sara fundó Carner Barcelona en 2010 para crear una colección de perfumes que exprese la vitalidad de las imágenes de su ciudad natal y para perpetuar la cultura de la artesanía española. Cada caja de perfume tiene un mensaje especial grabado en el panel interior que evoca la emoción que recuerda cada fragancia. Las diferentes emociones evocadas por toda la colección de perfumes componen el alma mediterránea de Carner Barcelona.