Imagina una velada atemporal: terciopelo marrón, trajes de leopardo, cócteles. Al fondo del jardín, una alquimista bohemia se afana. Su taller es un caos inspirado: flores secas, herbario antiguo, frascos misteriosos y orquídeas raras encontradas en una tienda oculta de Chinatown. Es aquí donde crea su última obra maestra: Brown Flowers. 

Se abre con notas vivas de cidra y cítricos secos, antes de un corazón cálido de café, flor de azahar y orquídea marrón. De fondo, almizcles refinados e iso e super dejan un rastro sutil y sofisticado.