A lo largo de la historia del mundo, siempre se ha considerado que el incienso posee cualidades sagradas y se utiliza por su poder evocador en rituales que pretenden purificar el alma, liberar la mente de los asuntos terrenales y elevar el espíritu a un estado superior del ser. En honor a esta noble tradición de incienso, Eau Sacrée es un aroma elegante y atemporal: una fuente de serenidad.